Solo VOX tiene éxito

Voy a empezar por aclarar que ni he votado ni votaré a VOX, este artículo es simplemente un análisis frío (o eso pretendo), y muy breve, de la realidad de los partidos en España.

Cuando una empresa tiene mucho éxito suele haber dos razones básicas:
  1. La empresa entiende bien lo que quieren comprar los cliente (o, al menos, una parte importante de esos clientes)

  2. La competencia es lo suficientemente mediocre como para no dejar de pensar en ellos mismos y en los competidores y ponerse a pensar en los clientes



En la foto del debate de ayer vimos a cuatro fracasados y un hombre de éxito. 

Fracasado número 1. El Partido Popular, después de 20 años de tener más de 150 escaños en el congreso, ahora pretende poner buena cara porque las encuestas le auguran quedarse cerca de los 100 diputados.

Fracasado número 2. El Partido Socialista ha conseguido algo parecido. Hace 15 años estaba por encima de los 160 escaños y solo necesitaba alguna ayuda para sacar adelante la presidencia del gobierno. Hoy se ilusionan si no pierden escaños con respecto a las elecciones de hace 6 meses.

Fracasado número 3. Podemos ha conseguido, en muy poco tiempo, pasar de generar miedo a generar pena.

Fracasado número 4. El super fracasado. Ciudadanos ha conseguido hacer realidad aquella mítica frase de Groucho Marx, ha conseguido, en unos pocos años, pasar de la nada a la más absoluta miseria.

El hombre de éxito. VOX está consiguiendo superar a los que los miraban por encima del hombro, desconcertar a los profesores politólogos y hacer temblar a los que se creían dueños de los escaños.


No me sorprende la miopía de los “líderes” políticos (dedicaré otra entrada de este Blog a explicar la razón de las comillas), me sorprende un poco más la falta de visión de los grandes asesores de los partidos y me resulta totalmente frustrante la escasísima capacidad de análisis de los supuestos especialistas plúmbeos que vemos cada día en las pantallas de los distintos canales de TV.

¿Por qué, en lugar de desahogarse contra el partido que consigue muchos votos, no se preguntan por qué los ciudadanos deciden votar a esos políticos? 

Volviendo al símil empresarial. Siempre me ha parecido que una cualidad imprescindible de un buen empresario es asumir (parece fácil pero hay muy pocos) que la responsabilidad de entender el comportamiento de los clientes es del empresario, no de los clientes. 

Solo VOX tiene éxito porque son los únicos que se han centrado en entender (entender es un verbo distinto de juzgar) lo que quieren sus “clientes” y han dejado de pensar en sus tristes competidores. Mientras los “capitanes” de los otros barcos llevan leguas hablando con su tripulación, mirando con el catalejo a los otros barcos, escribiendo su bitácora y sin pensar ni un minuto en sus clientes - votantes - ciudadanos.

Comentarios

Entradas populares de este blog

El malo o el tonto

Los españoles somos muy malos ingleses

Sin guiño no habrá Rey