¡Sí, hay culpables!
Me paso la vida viajando, horas y horas de avión. Veo España
desde fuera. Y fuera me preguntan cada día por lo que ha pasado.
¿Qué os ha pasado? ¿Qué habéis hecho?
Y he tenido que aprender a explicarlo. Y cuanto más lo explico más me duele.
¿Qué os ha pasado? ¿Qué habéis hecho?
Y he tenido que aprender a explicarlo. Y cuanto más lo explico más me duele.
Hace 5 o 6 años éramos ilusión, ambición, orgullo por
empezar a convertirnos en un país de éxito, con buenas empresas, buenos
deportistas, buenos profesionales, ... Por fin habíamos perdido los complejos. Y de pronto lo hemos
perdido todo y estamos en el barro. La crisis nos ha pasado por encima.
Pero ¿Por qué la crisis nos afecta más que a otros? ¿Hay
culpables?
Los españoles, los ciudadanos somos las victimas. Todos, de
derechas o de izquierdas, autónomos o funcionarios, empresarios o electricistas.
No hemos hecho nada. Hemos hecho lo de siempre, levantarnos temprano, trabajar,
estudiar, aguantar el atasco, hacerlo lo mejor posible, cambiarnos de coche,
pagar la hipoteca, votar cuando toca, defender al Madrid o al Barça, a Zapatero
o a Aznar y. de vez en cuando, cuando nos lo han pedido, manifestarnos.
Y mientras, mientras los ciudadanos trabajábamos, unos pocos
han jugado al Monopoly con nuestro país, nuestra economía y nuestras vidas. Y
esos son los culpables. No sé si se les puede juzgar (menuda justicia) pero son
claramente culpables.
El primero José María Aznar, presidente del gobierno que puso en
marcha la locura de la burbuja inmobiliaria para conseguir votos y su ministro
de economía, Rodrigo Rato, autentico ninot de falla que pasó por héroe de la
economía.
Igual de culpable fue Jose Luis Rodríguez Zapatero, que presidió un
gobierno que sabía que tenía que pinchar la burbuja pero no lo hizo por no
perder votos y sus ministros de economía, Pedro Solbes y Elena Salgado y los
gobernadores del Banco de España, Caruana y MAFO, que pusieron la obediencia a
sus partidos por delante de sus obligaciones.
Por eso tengo que decir que
Sí, hay culpables:
- José Maria Aznar
- Francisco Álvarez Cascos
- Rodrigo Rato
- Cristóbal Montoro
- José Luis Rodríguez Zapatero
- María Teresa Fernández de
- Alfredo Pérez Rubalcaba
- Pedro Solbes
- Elena Salgado
- Mariano Rajoy
- Luis de Guindos
- Jaime Caruana. Link1,
- Miguel Ángel Fernández Ordóñez. Link1,
Todos los que están son culpables pero es posible que no estén
en esta lista todos los que son. Se admiten sugerencias.
No sé si se les puede juzgar, no sé si son técnicamente culpables pero creo que, al menos, deberían desaparecer de la vida pública española.
Mariano Rajoy debería dimitir y convocar nuevas elecciones donde no apareciera ningún nombre de esta lista ni de los que han colaborado con ellos. Los españoles necesitamos empezar de nuevo pero no necesitamos a ninguno de los que nos han llevado al barro
Es una forma clara y sencilla de explicar la situación actual: “Mientras los ciudadanos trabajábamos, unos pocos han jugado al Monopoly con nuestro país, nuestra economía y nuestras vidas”... Y siguen jugando cada vez de forma más obsesiva y descontrolada
ResponderEliminarExcelente reflexión. Una puntualización, en mi opinión, si que hay que juzgarlos, a los de la lista y a muchos más (especialmente ciertos banqueros y empresarios que son quienes realmente mandan y les dicen a los políticos lo que tienen que hacer), responsables directos de este saqueo que llaman crisis. Es más, creo que hasta que no sean juzgados y paguen por sus crímenes, nuestro país no saldrá de la ruina en que lo han sumido ese hatajo de sinvergüenzas.
ResponderEliminar¡Salud y megapraxis!
Gracias por tu comentario.
EliminarOjalá pudiéramos conseguir que fueran juzgados pero al menos deberíamos conseguir que dasapareciéran de la vida pública
Sí señor, llevas toda la razón: nos han vivido por encima de nuestras posibilidades, gentes mediocres y ambiciosas. Sin embargo, ahora que se ve claro lo que ha pasado, todavía hay muchas personas que no salen a la calle a protestar contra esos viles políticos, los pasados y los presentes.
ResponderEliminarGracias Manuel por tu reflexión.
Manuel Rino